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EL HOMBRE DEL SACO crítica: El secuestrador más paciente de la Historia

Cuentecito de terror clásico en el que el Hombre del saco es el vecino que pide una tacita de sal

SPARTACUS VAN HALEN

Siempre hay espacio para un poquito de folk horror. Es demasiado tentador no utilizar historias terroríficas universales para hacer tus propias películas. ¿Y hay alguna historia más mítica que la del Hombre del saco? Ese señor que va con un saco y mete a los niños que se portan mal en él para comérselos cuando le entra el gusanillo. Es el Bruce Springsteen de las historias de miedo, el Sonrisas y lágrimas del terror, la Mona Lisa de los monstruos, el... Bueno, ya me han entendido.

Películas sobre el Hombre del saco o similares no hay tantas como cabría esperar, un buen puñado y casi todas bastante recientes, de modo que es una pieza de carne demasiado jugosa como para no hincarle el diente, y más con la crisis de creatividad que hay en el cine desde... casi siempre.

El argumento no inventa la rueda precisamente. Es la historia del Hombre del saco que se cuenta de padres a hijos desde tiempos inmemoriales, el problema es que más que una historia, aquí resulta que es totalmente cierto. Además, el tipo vive en la esquina de tu casa y resulta que tienes un hijo de un par de años corriendo arriba y abajo. Nada por lo que alarmarse...

 

“¿Pero El hombre del saco no se hizo ya el año pasado con Javier Botet?”

 

Con esto ya está todo explicado, pero como la película dura hora y media, algo más hay que poner. Por lo tanto, tenemos laaargas escenas de “tensión”, ruidos en el piso de abajo, que si la puerta ésta yo la dejé cerrada y ahora está abierta, que si me aparece un homeless en las cámaras de seguridad, que si la abuela fuma... La verdad, nada que no hayamos visto antes en chopotocientas películas… El hombre del saco no se deja ni uno de los greatest hits de las pelis de terror de los últimos treinta años.

Porque El hombre del saco va cogiendo ideas de aquí y de allá. Es innegable la similitud que tiene con las películas de It, sólo le falta que salgan cuatro críos en bicicleta. También hay cositas de Paranormal Activity, algún intento de “terror elevado” adorable, y muchos bocinazos esparcidos por aquí y por allá para que los chavales dejen el TikTok y miren un poco la pantalla de vez en cuando. Pero si hablamos de algo realmente novedoso, rompedor o mínimamente memorable, pues entre poco y nada.

El hombre del saco no se deja ni uno de los greatest hits de las pelis de terror de los últimos treinta años”

Entiendo que a estas alturas de la vida que se ha hecho todo lo “hacible” en el cine, cuesta mucho romper el molde, pero chico, por lo menos inténtalo, échale un poco de ganas, carajo, estrújate un poco los sesos a ver si se te ocurre algo. No puede ser que al principio de cada escena sepamos qué es lo que va a ocurrir los próximos tres minutos y no nos equivoquemos nunca. Y no estamos hablando de que yo sea el lápiz más afilado del estuche precisamente. Además, el diseño del propio Hombre del saco deja bastante que desear, en la mayoría de las escenas parece más un sintecho borracho que se ha perdido, que una criatura del averno. Y cuando se quita la capucha, parece el gemelo del Slot de los Goonies.

Dirigida por Colm McCarthy, director especializado en televisión con nada peyorativo al respecto, pues ha estado detrás de series cojonudas como Sherlock, Black Mirror, Peaky Blinders o Los Tudor. También dirigió Melanie. The Girl with All the Gifts, película que lo petó bastante en los festivales del 2015-2016 y que estaba bien cuca.

 

“¿Y si le ponemos chistera y pies palmípedos, y lo colamos como Babadook?”

 

El problema, como decía antes, está en el guion del primerizo John Hulme, que daba para un cortometraje bastante curioso, pero que en absoluto lo hacía para un largometraje. Pero bueno, son películas que son baratas de producir, y si hacen cuatro duros en taquilla y luego la conseguimos colar en alguna plataforma de streaming, pues ya les han pagado las vacaciones. Lo de hacer buenas películas, pues ya lo dejamos para la próxima.

Protagoniza el buenazo de Sam Claflin, que yo pensaba que era un recién llegado y me acabo de dar cuenta de que he visto la mayoría de sus películas y que nunca me quedé con su cara, imagínense qué carisma. Es el James Marsden de Hacendado. También está por ahí Antonia Thomas, ¡la Alisha de Misfits! ¿Se acuerdan de Misfits? ¡Fua, qué seriote! Estará por ahí, échenle un ojo (madre mía que viejos somos...).

El Hombre del saco no da mucho pero pide poco, es una película que mientras dura es entretenida, pero que no deja ningún rastro en el espectador. Es un Riskettos cinematográfico, el tofu del celuloide. Se nota cierto intento de crear una saga, no sé yo si acabará sucediendo, pero desde mi humilde trono aconsejaría intentar buscar una voz propia y dejar de robar a los vecinos.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Congelada en carbonita

INF VNV 2

Recomendada por Kuato a: adolescentes que vayan al cine a meterse mano.

No recomendada por Kuato a: quien tenga un mínimo bagaje en el cine de terror.

Ego-Tour de luxe por: el muñequito del póster sale poco en la película, pero tiene su gracia. Un Pinocho malrollero.

Atmósfera turbínea por: que en ningún momento se sale de la línea marcada, es tan poco original como previsible. Además, hay muy poco argumento y carisma para tanto largometraje.

 

EL HOMBRE DEL SACO. "Bagman" (2024). Dirección: Colm McCarthy. Guión: John Hulme. Reparto: Sam Claflin, Antonia Thomas, William Hope, Steven Cree, Frankie Corio, Adelle Leonce, Henry Pettigrew, Sharon D. Clarke, Neil Linpow, Caréll Vincent Rhoden, Jordan Gubian.. ESTRENO EN VENUSVILLE: 27/09/2024.

 

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