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BITELCHÚS BITELCHÚS crítica: Muertos S.A.

Michael Keaton y Winona Ryder desempolvan el traje a rayas y el vestido rojo 36 años después

RAY ZETA

Algún día me tendrá que explicar alguien qué sentido tiene resucitar sagas o pelis del pasado que nadie pide. Será que el ejecutivo de turno, calvo, con barriga, hiperplasia prostática y exceso de colesterol, lloriquea por los rincones del estudio convencido de que el cine de su época sí que era cine y no el que se hace ahora, y por eso da luz verde a estos proyectos. Aunque una cosa es renovar la saga con nuevos actores que heredan la franquicia a modo de relevo generacional, como ha sucedido con Creed, Scream, la última trilogía de Star Wars o Ghostbusters, y otra muy diferente continuarla allí donde se quedó, como Terminator: Destino oscuro, Rambo: Last Blood, Matrix Resurrections o Indiana Jones y el dial del destino, aunque hayan pasado 20, 30, o como en el caso de Bitelchús, 36 años.

Con la mano en el corazón: ¿alguien cree realmente que el mundo necesitaba la secuela de Bitelchús? No, claro que no. Bitelchús fue en su momento una comedieta fantástica simpática, que se benefició de su frescura (era la segunda película de Tim Burton) y de su desparpajo, su tono negro y su mala leche (Bitelchús era un personaje políticamente incorrecto ya para su época), tan fácil de visionar como de olvidar. Si ya no hubiera tenido sentido generar una secuela después de su estreno, imaginen 36 años después… Pero aquí está. Una secuela destinada a los niño/as y adolescentes de los años 80, que hoy ya hombres y mujeres hechos y derechos, llevarán a sus hijos a verla, de la misma manera que los llevan cuando en la sala Phenomena reponen La princesa prometida, Gremlins o Ghostbusters.

 

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Público que con Bitelchús Bitelchús quedará plenamente satisfecho o medianamente satisfecho según su nivel de exigencia. Porque en lo que acierta la nueva propuesta de Tim Burton es en conservar sin traicionarlo el espíritu de la original. Olvídense de fan services pastelosos como el de Cazafantasmas: Más allá. Bitelchús Bitelchús recupera de la primera película los personajes de Michael Keaton (cómo no), Winona Ryder y Catherine O’Hara, y repite el tono negro y el humor gamberro marcas de la casa, solventando algunos de los errores del pasado, como el corto minutaje de Bitelchús y la poca presencia del mundo de los muertos, además de mantener unos efectos visuales artesanales por momentos cutre salchicheros, que harán las delicias de los amantes de los ninotes y los animatronics.

Bitelchús Bitelchús no supera Bitelchús, pero a pesar de sus errores es una correcta secuela que no cae en el ridículo en ningún momento”

En esta ocasión, Bitelchús tiene más minutos y más importancia en la trama principal. Sigue siendo el personaje salido cachondo, descarado y gamberro que conocemos, pero más de boquilla que de actos, pues en la primera parte se pasaba todo el tiempo que salía metiéndole mano a Geena Davis, y eso no estaría precisamente bien visto hoy en día. Gran acierto también situar la mayor parte de la acción en el mundo de los muertos, pues permite hilvanar los mejores gags. En cuanto al resto de personajes principales, genial Winona Ryder por poseer un arco evolutivo perfecto, correcta Catherine O’Hara por ejercer de mero personaje cómico, y acertada Jenna Ortega como hija rebelde de Winona Ryder, aunque parezca la prima hermana de Wednesday Addams (no en vano, los guionistas Alfred Gough y Miles Millar, son también los de Miércoles).

 

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Peor parados salen Monica Bellucci y Willem Dafoe... Tras sus prometedoras presentaciones, protagonizan una subtrama que no aporta absolutamente nada a la película, acabando incluso por hacerle más mal que bien. Mal endémico del cine de Tim Burton, más interesado en el envoltorio que en la historia, con un guión al que le cuesta arrancar y luego deriva por las correspondientes set pieces de manera un tanto deslavazada, hasta llegar a un final resuelto atropelladamente, como si el director tuviera prisa por irse a casa a jugar con sus muñequitos de Pesadilla antes de Navidad. Es curioso como a pesar de marcar de manera tan visible su obra con su imaginario, Tim Burton nunca ha ejercido de guionista y aún así la mayoría de sus películas tienen problemas de guión.

Pero respiren tranquilos, Bitelchús Bitelchús no supera Bitelchús, pero a pesar de sus errores es una correcta secuela que en su conjunto aprueba y que no cae en el ridículo en ningún momento, como ha ocurrido en casos recientes como Terminator: Destino oscuro, Rambo: Last Blood, Matrix Resurrections o Indiana Jones y el dial del destino. Y eso teniendo un personaje tan anticuadamene ochentero en estilo, humor y estética como Bitelchús, es todo un mérito. Secuelizar Bitelchús era tan arriesgado como lo sería adaptar “El show de Benny Hill”, y Tim Burton ha salido victorioso, lo que según sus propias palabras ha provocado que haya recuperado el gusto por volver a dirigir cine, que había perdido en 2019 a raíz de Dumbo. Pues si vuelve a dirigir cine, ahora que le ha dado por tirar de pelis pasadas, que vuelva a hacer las de Batman sin Michael Keaton.

 

INFORME VENUSVILLE

Venusentencia: Dos Caras Harvey

INF VNV 3

Recomendada por Kuato a: quien tras Indiana Jones y el dial del destino perdió la fe en las secuelas de Hollywood.

No recomendada por Kuato a: quien crea que “Bitelchús” es la onomatopeya de un estornudo.

Ego-Tour de luxe por: el personaje de Bitelchús, combinación entre Tex Avery, la Máscara y Benny Hill.

Atmósfera turbínea por: que Tim Burton no tenga pensado hacer la versión real de La novia cadáver con Monica Bellucci tal como sale en la peli.

 

BITELCHÚS BITELCHÚS. “Beetlejuice Beetlejuice” (2024). Dirección: Tim Burton. Guión: Alfred Gough, Seth Grahame-Smith, David Katzenberg. Reparto: Michael Keaton, Winona Ryder, Jenna Ortega, Justin Theroux, Monica Bellucci, Willem Dafoe, Catherine O’Hara. ESTRENO EN VENUSVILLE: 06/09/2024.

 

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