<¡Lo que pagaríamos todos por una gotita de éstas!
Diríase que la peli es una combinación de Una mente maravillosa y El cortador de césped, con un Bradley Cooper de prota absoluto tras pasarse toda la vida haciendo de secundario, y un Robert De Niro de secundario tras pasarse toda la vida haciendo de prota absoluto.
Es que ya se va teniendo una edad, ¿verdad Robert? Y compensa más aparecer en tres escenas, parar la mano, y cobrar el cheque, que aumentar 30 kilos y tener que currarse el papel.
A todo esto, la peli no parece que vaya a ser nada del otro mundo y está dirigida por Neil Burger, el de El ilusionista./>
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