<Imagen la escena: llaman a la puerta, abre Hugh Grant y se encuentra una cigüeña: “¿El Sr. Grant? Firme aquí, por favor”. Y cuando Hugh Grant abre el paquete, descubre con sorpresa un bebé chinito.
Pues eso ha sido exactamente lo que ha pasado, que al actor de 51 años le ha salido una hija china fruto de lo que oficialmente se ha llamado “una aventura ocasional” (o sea un aquí te pillo-aquí te mato a pelo, para que nos entiendan) con una actriz china 20 años más joven de nombre Tinglan Hong.
¿Y qué dice ahora la estrella de Cuatro bodas y un funeral? Pues que pese a ser papá por primera vez y que no haya sido un nacimiento planeado, asegura mediante un portavoz estar encantado y sentirse feliz con la noticia, llevarse bien con la madre, y haber llegado a un acuerdo con ella para hacerse cargo de la manutención del bebé, de momento cada uno en su país.
Hugh Grant tiene mala suerte en estos temas, hace diez años ya fue pillado in fraganti, detenido y fichado por ello, yendo de putas en Los Angeles tras subirse una negrita al coche (incidente que le acabó costando el noviazgo con Elizabeth Hurley), y ahora echa un polvo en una noche loca en China con el convencimiento de que está tan lejos de casa que una vez de vuelta a Londres, si te he visto no me acuerdo, y le sale premio. ¿Se imaginan la cara que debió poner cuando nueve meses después le ha sonado el teléfono y una voz con acento chino le ha comunicado la buena nueva?
Él que siempre ha sido uno de los solteros de Hollywood y uno de los estándares de la elegancia británica y del buen gusto, verse en tales menesteres… Por eso ahora la prensa amarilla, la rosa y la de todos los colores se está cebando con la noticia (si en vez de él hubiera sido algún farrero oficial como Charlie Sheen o Colin Farrell a nadie le habría importado un carajo),
Pues hala Hugh, a repasar títulos como Tres solteros y un biberón, Papá por sorpresa, tu película Nueve meses, y a enviar un cheque a China todos los meses. Ah, y la próxima vez pasa antes por una farmacia./>
La cara que puso Hugh Grant al conocer la noticia
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