<Mucha curiosidad hay acerca del tratamiento que se le dará a Drácula en la nueva versión que el debutante Gary Shore dirige con Luke Evans de protagonista. A raíz del lanzamiento en dvd de El Hobbit: La desolación de Smaug, Luke Evans ha emitido unas declaraciones que han aportado algo de luz sobre la cuestión, y sorprendentemente, será una versión menos vampírica de lo que cabía esperar, basada más en el personaje de Vlad el empalador, aunque sin descuidar los elementos fantásticos:
Esto es lo que ha declarado: “La película tiene todo lo que esperamos de una re-narración histórica del vampiro más famoso que jamás ha existido, pero lo que hace distinguirse de todas las demás historias de Drácula es la historia de su origen, ya que se centra en la figura histórica que es Vlad el Empalador o Vlad Tepes, como me gusta llamarlo. Cuando le llamamos Vlad el Empalador, todo el mundo supone que es lo único que hizo todos los días, empalar a un montón de gente en el bosque. Sí, él hizo eso, pero este hombre también es conocido en los libros de Historia como un líder muy exitoso y un hombre que gobernó sobre una nación muy tranquilo durante mucho tiempo.
También era un hombre de familia, crió a su hijo, amaba a su esposa, y la gente le quería mucho también. Estamos trayendo ese elemento de la figura histórica a la luz, y queremos que la gente entienda más de su historia humana. Entonces, cuando tenemos la historia humana en funcionamiento, es cuando te das cuenta de que hay cosas que tienen que sacrificarse y decisiones que tomar, lo que nos permite fusionar la historia ficticia que Bram Stoker creó, con la figura histórica que es Vlad el Empalador”.
O sea, que si al final se introduce la creación de Bram Stoker, sí que tendrá vampirismo, ¿no? Hombre, es lo mínimo llevando el nombre de Drácula en el título… Todo sea para quitarnos el mal sabor de boca que nos dejó la ridícula Drácula 3D de Darío Argento…/>
Luke Evans, un Drácula que promete
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